Mitos y realidades de la prueba Poligráfica

La prueba poligráfica, comúnmente conocida como detector de mentiras, ha sido objeto de numerosas concepciones erróneas a lo largo de los años. Este artículo ofrece un análisis basado en el ensayo de Raymond Nelson de 2024, con el objetivo de aclarar algunos de los mitos más comunes asociados con esta técnica.

La Respuesta de Lucha o Huida

Durante mucho tiempo, se ha creído que las reacciones fisiológicas que se observan durante la prueba poligráfica están relacionadas con la respuesta de lucha o huida. Esta respuesta fisiológica, propuesta por Walter Cannon, describe cómo los animales (incluidos los humanos) reaccionan ante la percepción de daño o amenaza. Sin embargo, es importante destacar que la prueba poligráfica no se centra en un estado general de nerviosismo, sino en las diferencias en los cambios fisiológicos ante distintos tipos de preguntas.

Teoría del Polígrafo

La teoría básica detrás de la prueba poligráfica es que los cambios en la actividad fisiológica están asociados a la veracidad o falsedad de las respuestas del examinado. Estos cambios incluyen la actividad muscular en el tórax, cambios electrodérmicos, presión sanguínea y actividad vasomotora. Es crucial entender que el polígrafo no mide directamente la mentira, sino indicadores que se correlacionan con la mentira.

¿Qué Provoca los Cambios Fisiológicos?

Los cambios fisiológicos observados en una prueba poligráfica pueden estar influenciados por varios factores, como la carga cognitiva, disonancia cognitiva, carga emocional, habituación, sensibilización y control social. Estos factores reflejan la atención y negación de un recuerdo, lo que puede producir reacciones fisiológicas que el polígrafo detecta.


Mitos de la prueba

    Mito 1:

    La Prueba Poligráfica Compara a una Persona con un Grupo Normativo

    Realidad: La prueba poligráfica utiliza una técnica conocida como comparación ipsativa, la cual evalúa las respuestas fisiológicas de una persona en relación con ella misma, no comparándola con un grupo normativo. Se observan los cambios o diferencias en las respuestas de un individuo ante diferentes estímulos dentro de la prueba, lo que permite analizar su reacción en contextos específicos y únicos.


    Mito 2:

    El Nerviosismo, Estrés o Ansiedad Pueden Hacerte Fallar la Prueba

    Realidad: Aunque estos estados emocionales pueden influir en el comportamiento general, no afectan la capacidad del polígrafo para diferenciar entre la verdad y la mentira.


    • Nerviosismo: Asociado a síntomas físicos como temblores o sudoración, no provoca cambios instantáneos en las mediciones del polígrafo durante la prueba.

    • Estrés: Relacionado con factores externos y temporales, puede mejorar el rendimiento adaptativo, pero no genera respuestas fisiológicas que alteren el resultado de la prueba.

    • Ansiedad: Si bien es un trastorno más grave, no provoca respuestas diferenciadas en la prueba poligráfica.


    Mito 3:

    La Desconfianza en la Prueba o en el Examinador Afecta los Resultados

    Realidad: La desconfianza o escepticismo hacia la prueba no influye en los resultados. El polígrafo se centra en las reacciones fisiológicas ante preguntas específicas sobre conductas pasadas, no en la relación entre el examinado y el examinador. Además, la prueba se basa en evidencia empírica y en resultados reproducibles, independientemente de las creencias del examinado sobre su eficacia.


    Mito 4:

    Las Personas con Psicopatía o Mentira Patológica Pueden Manipular los Resultados

    Realidad: Aunque los individuos con trastornos de personalidad como la psicopatía pueden presentar comportamientos engañosos, no pueden manipular los resultados del polígrafo para parecer veraces cuando están mintiendo. La psicopatía no implica una desconexión con la realidad, y la idea de que los mentirosos patológicos creen sus propias mentiras hasta el punto de pasar una prueba de polígrafo es un mito sin respaldo científico.


    Mito 5:

    Las Fantasías o la Imaginación Pueden Influir en los Resultados

    Realidad: El polígrafo mide reacciones fisiológicas ante la falsificación deliberada de la realidad, es decir, el engaño. Las fantasías o pensamientos que no están conectados con un recuerdo real no alteran los resultados de la prueba, ya que no representan un intento consciente de engañar.


    Mito 6:

    La Sugestionabilidad o Creencia en la Prueba Afecta los Resultados

    Realidad:El grado de creencia en la efectividad de la prueba por parte del examinado no influye en los resultados. El polígrafo, como cualquier método científico, se basa en pruebas empíricas y resultados que se pueden reproducir, independientemente de si el examinado cree o no en su eficacia.


Conclusión

En resumen, la prueba poligráfica es una herramienta basada en principios científicos que mide reacciones fisiológicas específicas para detectar el engaño. La mayoría de las preocupaciones comunes sobre su precisión están basadas en mitos y no en la realidad científica.